...eso es exactamente lo que pienso yo. Enseñando se aprende, se aprende de nuestros alumnos, de nuestros errores, de nuestro trabajo. Creo que incluso un profesor con mucha experiencia nunca deja de aprender. Parecen palabras previsibles, que se oyen a menudo pero es como un "lema" que siempre hay que considerar antes de empezar una lección, si de verdad lo que queremos es ser profesores. A lo mejor, si la considero como una misión es exagerado, pero tampoco es simplemente un trabajo qualquiera. Cuando mis alumnos me hacen preguntas y tienen aquella sana curiosidad que me hace sentir orgullosa de ellos eso ya, para mi, es un éxito. Es también un aprendizaje, porque de ellos aprendo que el interés no se compra y no es nada fácil suscitarlo en niños de diez o once años, aprendo a elegir como preparar una lección para que no se aburren demasiado, aprendo a creer en mis posibilidades y no siempre es cosa obvia.
giovedì 27 novembre 2014
...eso es exactamente lo que pienso yo. Enseñando se aprende, se aprende de nuestros alumnos, de nuestros errores, de nuestro trabajo. Creo que incluso un profesor con mucha experiencia nunca deja de aprender. Parecen palabras previsibles, que se oyen a menudo pero es como un "lema" que siempre hay que considerar antes de empezar una lección, si de verdad lo que queremos es ser profesores. A lo mejor, si la considero como una misión es exagerado, pero tampoco es simplemente un trabajo qualquiera. Cuando mis alumnos me hacen preguntas y tienen aquella sana curiosidad que me hace sentir orgullosa de ellos eso ya, para mi, es un éxito. Es también un aprendizaje, porque de ellos aprendo que el interés no se compra y no es nada fácil suscitarlo en niños de diez o once años, aprendo a elegir como preparar una lección para que no se aburren demasiado, aprendo a creer en mis posibilidades y no siempre es cosa obvia.
Iscriviti a:
Commenti sul post (Atom)
¡Estoy muy de acuerdo!
RispondiEliminaTotalmente de acuerdo, Giorgia.
RispondiElimina